miércoles, 25 de septiembre de 2019

MIDSOMMAR: EL TERROR NO ESPERA A LA NOCHE


La ola de nuevos directores que apuestan por la autoría cinematográfica, mas que por el blockbuster taquillero es cada vez menor y las obras que se producen apoyadas por grandes estudios son cada vez más escasas.

Ari Aster sorprendió a todo el mundo con su debut en 2018 con la cinta El Legado del Diablo (Hereditary) que se estrenó en varios festivales internaciones y cosechó muy buenas criticas y sobre todo comentarios que elevaban la obra a la de un clásico instantáneo, por tratarse de una historia que regresa a esos miedos más primitivos y que de alguna manera compartía esa empatía por lo sobrenatural desde las posibilidades de un demonio o poder que proviene fuera de este mundo, como en su momento lo hizo Roman Polanski con la aterradora El Bebé de Rosemary.

Ahora Aster después de lograr hacer voltear a todo el mundo de la critica de cine para seguir de cerca sus pasos, presenta su segunda película que es llamada Midsommar que en realidad significa el pleno verano o el verano en su parte medular, celebración que se realiza en Suecia desde hace varias décadas y sirve para conmemorar la época del año con más luz y naturaleza absoluta.

Midsommar trata sobre Dani(Florence Pugh) que misteriosamente ha perdido a toda su familia y que se encuentra en un momento en que su único pilar para mantenerse viva es su novio Christian(Jack Reynor) que curiosamente no se siente del todo cómodo al cargar con el peso de ser, el salvavidas de su pareja. Christian decide ir con sus amigos a Suecia a la propiedad de la familia de Pelle(Villhelm Blomgren) donde se celebrara esta tradición llena de paz interior y de mucha naturaleza. Obviamente Christian se siente obligado a invitar a Dani al viaje y así esta historia aparentemente normal arranca con este viaje que realizaran Dani, su novio y sus amigos para pasar unos días en medio de este lugar donde aparentemente todo es armonía.

Las cosas que suceden durante los 9 días de estadía de los amigos comienza con un viaje de hongos alucinógenos y terminara en una apoteosis aterradora y bizarra que por supuesto cambiara el rumbo de sus vidas para siempre. La cinta de Aster toma un rumbo no solo muy arriesgado sino que tiene tremendos pantalones para mostrar lo más primitivo del ser humano y su relación exagerada con fuerzas que provienen del más allá. El culto pagano y sus ideologías extremas, los ritos, el colosal abismo de la mente del hombre para provocar y evocar fuerzas que ni siquiera son entendibles, juegan un papel principal en esta experiencia que lleva al espectador de la mano y que por momentos se vuelve insoportable, ya que lo que va ocurriendo se vuelve cada vez mas incomodo de ver.
Aster juega con una fotografía naturalista pero muy estrafalaria de la mano de su fotógrafo Pawel Pogorzelski que compone los cuadros simétricos perfectos y dota de unas sensaciones completamente extrañas que hacen que el ambiente en la sala de cine se sienta sofocante. Las actuaciones apabullantes de Florence Pugh que compone a esta mujer que ha perdido todo y que naturalmente encuentra en este lugar lo que tanta falta le hace. Si esta cinta no fuese tan aterradora, podríamos decir incluso que se trata de un drama familiar sobre la pérdida y el reencuentro de lo perdido.
El arte y toda las simbología que se utiliza en la cinta es sin duda un plato exquisito, así como el ritmo que va gradualmente en su extensa duración 147 minutos.


Al final el público sale de la sala devastado, asustado, asqueado y hasta podría decir que después de ello puede haber pesadillas rondando en su cabeza, cosa que actualmente pocas cintas de este género logran después de salir de la experiencia de la gran pantalla.
Ari Aster se corona entonces como un gran autor, como un director con muchas obsesiones, con temas recurrentes, pero con gran frescura al momento de presentar su nueva película.

EL VEREDICTO: Si su anterior cinta tenía un aire al Bebé de Rosemary de Polanski, esta cinta hace homenaje al cine de Robin Hardy, Jodorovski y hasta un poco se siente como un filme de Wes Anderson, pero por supuesto con su estilo único y que logra que se eleve el cine de género a un lugar especialmente aterrador, dejando de lado los convencionalismo del miedo. Un plato no apto para todo el público, sino que se trata de algo exótico, cocinado a fuego lento y que si se le da la oportunidad no dejara indiferente a nadie. Una de las mejores películas del 2019 sin duda alguna.


CALIFICACIÓN: 9 DE 10
DIRECTOR: ARI ASTER
ACTORES: FLORENCE PUGH
GÉNERO: TERROR

lunes, 23 de septiembre de 2019

RAMBO: LAST BLOOD


Sylvester Stallone ha construido una carrera llena de tropiezos y éxitos, con ideas verdaderamente geniales y sigue entercado en traer de vuelta a personajes icónicos como Rocky o Rambo a las pantallas. En el verano de 1982 la cinta First Blood dirigida por Ted Kotcheff y basada en una novela no muy exitosa del escritor David Morrell llego a las pantallas con la parafernalia de un Stallone que venía de interpretar por tercera vez a Rocky Balboa y necesitaba un cambio con un personaje nuevo para seguir adelante con su carrera. Stallone para muchos, limitado actoralmente fue duramente criticado por elegir como siguiente proyecto, un personaje que representaba los miedos y frustraciones de la guerra de Vietnam y que finalmente se convertiría en una imagen representativa de lo negativo que fue la guerra en los Estados Unidos y como aquellos excombatientes luchaban por mantenerse cuerdos, en un mundo desconocido para ellos.

La cinta fue un éxito moderado, pero permitió a sus productores pensar en este personaje como un héroe de guerra minimizado y frágil que podía perdurar en la mente de los espectadores y colocarse como una moda pasajera. La moda superó las expectativas y cuando estreno Rambo II no solo se convirtió en la cinta mas taquillera de ese momento sino que catapulto la carrera de Stallone a otro nivel de popularidad.

Ahora muchos años después Rambo regresa a la pantalla con 74 años encima y con mucho camino recorrido para supuestamente terminar su andar por el mundo con esta quinta secuela llamada Last Blood haciendo alusión al título de la primer película y tomándolo como un capítulo conclusivo de esta saga.

Aquí John Rambo(Stallone) vive en paz en su rancho de Arizona, con una mujer mexicana llamada María(Adriana Barraza) que funge como una madre cuidadora del personaje y que tiene una nieta llamada Gabrielle(Ivette Monrreal) ambas mexicanas, que han visto siempre a Rambo como un tío o un padre sustituto.

Gabrielle esta empecinada en buscar a su padre verdadero en México, que la abandono sin razón alguna. Por supuesto María y John no quieren que vaya, pero sin importar sus consejos, Gabrielle se embarca en la búsqueda de su padre por México(obviamente un México peligroso) y esto tendrá fatales consecuencias para ella y su familia.

John Rambo desatara un huracán lleno de violencia para encontrarla y llevarla a casa. La premisa es sencilla, fácil de entender, cine de venganza al más puro estilo de Charles Bronson,  aquí hay un Rambo lleno de locura, inclusive su mente le recuerda cada vez que esta a punto de perder la razón y es por ello que decide en vez de reprimir su naturaleza, darle rienda suelta bajo el pretexto de buscar venganza por aquellos que violentaron a su familia.

La cinta la dirige Adrian Grunberg que anteriormente tuvo su primer experiencia como director con la cinta Get The Gringo protagonizada por Mel Gibson, Stallone se coloca en el lugar del guionista y actor principal y por supuesto que ambos toman la decisión de llevar esta entrega por los caminos exagerados del "Explotation" puro, sangre, cabezas rodando, violencia extrema, más sangre y una secuencia final de antología con mucha violencia llevada hasta las últimas consecuencias.

La hechura no es perfecta, se notan las costuras de un guión que cae en lo inverosímil, en lo ridiculo y a veces hasta en lo extremadamente melodramático. Los agujeros en la trama son evidentes, algunas actuaciones muy regulares como la del mediático Oscar Jaenada que interpreta aVictor Martinez un despiadado narco mexicano y la del villano principal Sergio Peris. Mencheta que no logran construir ningún sentimiento de profundidad en su desempeño y son por supuesto villanos muy malos sin alma.

El México retratado por la cinta es  otra vez ese lugar feo, pobre, maloliente, lleno de criminales y personas muy malas que por supuesto tendrán que enfrentarse con él excombatiente americano lleno de odio hacia su maldad.

Rambo Last Blood es una cinta con una calidad casi de una cinta directa a video, pero de verdad se agradece que Grunberg y Stallone hayan optado por un camino extremo, es de ese tipo de cine que no se hace más y que no tiene vergüenza al tratarse de una violencia sin tapujos y totalmente visceral. Su desempeño es regular pero su climax es demasiado catártico como para no disfrutarlo.

Actualmente el cine de acción ha sido azucarado por héroes sin ninguna capacidad de asombrar al público, los Rápidos y furiosos que están de moda jamás podrán mostrar una faceta violenta sin estilizar su procedencia, nunca ni Vin Diesel, ni La Roca se podrían ver como John Rambo, curtido, sucio, triste, deprimido y sobre todo con una locura que espera cualquier pretexto para explotar.

EL VEREDICTO: Una cinta con un desempeño irregular, con decisiones erróneas y otras muy discutibles, pero que tiene los mejores 15 minutos finales en la historia del cine de acción Gore, nos hubiese encantado un mejor desenlace de este personaje, un guión mas trabajado, pero eso no quita que la cinta sea demasiado entretenida y sincera en su proceder, además que se agradece que sea de esa forma y no una más de acción sin cerebro que ni siquiera tiene los pantalones para mostrar ese lado salvaje del héroe que lo vuelven una bestia totalmente incontrolable y es por ello que si deciden verla en el cine, la verdad es que se vuelve un plato muy disfrutable a la vieja escuela del cine de acción.

CALIFICACIÓN: 6.5 DE 10
DIRECCIÓN: ADRIAN GRUMBER
ACTORES: SYLVESTER STALLONE
GÉNERO: ACCIÓN

lunes, 9 de septiembre de 2019

ESO Capítulo Dos


El cine de terror últimamente se ha dedicado a cosechar éxitos entre los espectadores adolescentes, brindándoles un espectáculo lleno de "JumpScares" o sustos provenientes de los decibeles auditivos, poca atmósfera y por supuesto historias llenas de clichés y de momentos nada memorables. Teniendo también como característica una carencia de ideas, historias o villanos que palidecen ante la gama de personajes que en el pasado protagonizaron varias cintas que hoy en día, se encuentran como las más aterradoras de la historia.

En 1990 la cadena Warner Bros Televisión lanzó en forma de miniserie la novela de Stephen King publicada en 1986 bajo el nombre de ESO(IT), donde nos contaba la historia de un pequeño pueblo en Maine donde comienzan a ocurrir aterradores asesinatos, que son perpetrados por una entidad malévola que toma la forma de un payaso llamado Pennywise y que refleja aquello que subyace en una sociedad aparentemente tranquila y donde la concentración de maldad puede ser abrumadora. Un grupo de adolescentes auto llamado los perdedores son los que deciden hacer frente a este ser malévolo y poder destruirlo antes de que siga matando más gente.

Stephen King como siempre, acudiendo a sus vivencias adolescentes y deseos logra en esta obra de maduración, una narrativa que va del presente al pasado, mezclando las ideas de los miedos más profundos del ser humano y mostrando también el despertar sexual entre este grupo de jóvenes que deciden unirse en todo aspecto con tal de destruir el mal que los acecha.

Por supuesto, en la adaptación de 1990 todos esos elementos violentos y sexuales desaparecieron dando lugar a un producto televisivo, que dirigió Tommy Lee Wallace cuya carrera estaba en ascenso en el género del terror con dos películas anteriores de moderado éxito Halloween 3 y La Hora del Espanto 2 y cuyo acierto en esta miniserie fue darle vida a uno de los personajes más aterradores de todos los tiempos, encarnado por un actor también bastante aterrador llamado Tim Curry, quien interpretaba al payaso Pennywise de una manera magistral.

Ahora con la idea de que todo lo retro está de moda, en especial lo ocurrido en el cine de la década de los 80´s Warner Bros, decide darle una verdadera oportunidad a la novela de King de llevarse a la pantalla y elige a Cary Fukunaga (que originalmente era también el director de la adaptación), Chase Palmer y Gary Dauberman para realizar el guión que finalmente termina por dirigir Andy Muschietti de una manera muy correcta y así en el verano de 2017 se estrena la cinta IT(ESO) con un éxito sin precedentes. Fue la película más vista de este género en el año y por supuesto sentó las bases para la llegada de una segunda parte que en realidad es la conclusión de la novela de King que fue dividida en 2 partes. 

Así,  Eso Capitulo Dos ha estrenado y como era de esperarse, el buzz acerca de la misma, y la inclusión de un reparto bastante conocido como Jessica Chastain, James McAvoy y Bill Hader para encarnar la visión madura de este grupo de perdedores, han logrado dar en el blanco, posicionando la taquilla en este primer fin de semana a su favor, aunque no superior a la primera entrega.

Muschietti que regresa a dirigir esta conclusión y con solo un guionista bajo el brazo Gary Dauberman, logra narrativamente hilar las partes claves de la primera entrega y colocar al espectador nuevamente en ese lugar donde se encuentra muy vulnerable, dejando al malvado Pennywise que dicho sea de paso, puede lograr una nominación al Oscar para Bill Skasgard como actor de reparto, atacar a sus víctimas y convertirse en un terror ambulante sin tregua, al cual hay que temer.

Los perdedores han madurado, han crecido y deciden volver al pueblo cuando Mike(Isaiah Mustafa) les llama para pedirles que cumplan la promesa de regresar y detener a Pennywise en su camino de violencia y maldad. Así se desatan en la narrativa bastantes momentos aterradores, de búsqueda, de redención, por supuesto dejando hacia el final la esperada conclusión y el enfrentamiento final ente este grupo de amigos y el monstruo que les ha quitado el sueño toda su vida.

Muschietti en esta segunda entrega se engolosina con las elipsis fantásticas, con los primeros planos del payaso monstruoso, con los flashbacks innecesarios intentando conectar definitivamente la historia del pasado con la del ahora, olvidándose que algunos flashbacks no hacen caminar la historia sino que la detienen y con el excesivo uso de efectos digitales que aunque la mayoría son bastante buenos, en exceso logran sentirse repetitivos e incluso predecibles.  Su extensa duración, 169 min, la vuelve un poco cansina y diluida entre tanto susto que pretende dar. 

Eso Capitulo Dos pierde en el camino varios elementos que volvían interesante la primera entrega, deja de lado muchas cosas para dar explicaciones y lo más lamentable es que el miedo, el terror, el monstruo por el cual esperamos 2 años, esta extremadamente dosificado, sale muy poco y aunque es verdaderamente apabullante y aterrador, se extraña que aquí no sea el verdadero problema de los protagonistas, sino que esta segunda mitad se centra mucho más en los traumas y los recuerdos que en el miedo del cual se alimenta Eso.

Sin embargo este Capitulo Dos no es para nada una cinta de terror convencional, contiene momentos de puro miedo, atmósferas aterradoras e ideas que son deliciosas para degustar si la sangre y los monstruos son ingredientes que se disfrutan demasiado. Viéndola como una sola película funciona, logra crear momentos inolvidables y eso ya es de agradecer en estos días que el cine de terror solo sirve para propósitos muy específicos y no tiene una búsqueda real de la experiencia en pantalla.

EL VEREDICTO: Una conclusión que peca de ser repetitiva, cansina y hasta un poco predecible, pero sin duda alguna los momentos de miedo, el ritmo y el diseño de todas las formas de este Payaso Maldito valen la pena para pasar un excelente rato en el cine. Un digno cierre para la novela de King aunque quizá, solo quizá, pudo haber sido mejor.


CALIFICACIÓN 7 DE 10
DIRECCIÓN: ANDY MUSCHIETTI
ACTORES: JESSICA CHASTAIN, JAMES MCAVOY
GÉNERO: TERROR