READY PLAYER ONE

Lo que pudiera parecer un blockbuster simple, o una cinta que busca el enaltecimiento de la cultura pop y la forma mas actualizante de traer el cine de los 80´s, videojuegos retro y todo lo que compone la tan no identificada realidad pasada, es precisamente lo que Steven Spielberg logra con su nueva cinta Ready Player One.

El mundo del hoy pero en vista del mañana

Basada en la obra de Ernest Cline y que se convirtió rápidamente en un libro de culto en el 2011, la cinta que hace auto referencia al cine más palomero de hace mas de 20 años y a la obsesión latente en la juventud del hoy de colocarse en medio de un punto muerto en el cual veneran al pasado pero siempre colocan la piedra sobre la tecnología del futuro, es sin duda el espectáculo visual que nos trae al viejo Spielberg que nuevamente regresa a lo que mejor saber hacer, un cine sin pretensiones, entretenido, divertido, emocionante y por supuesto enormemente tecnológico aprovechándose de todos los avances en Motion Capture y en Fondos digitales, apoyado como siempre por su compañero de aventuras el Director de fotografía Janusz Kamisnki que logra iluminar mas o menos de una manera uniforme todos esos gráficos que forman el 80% de la película que pretende diferenciar entre lo real y lo virtual, dotando de una singularidad bastante prominente a cada uno de sus personajes.

Difícil dejar de ver la red

La cinta que trata sobre Wade un joven que en el mundo virtual se hace llamar Parzival, un nerd gamer que pasa sus días mas involucrado con lo que sucede dentro del Oasis; un mundo digital que representa la utopia de una realidad donde todo es posible, que en su vida que representa lo peor del ser humano y donde la pura verdad es mala en el afuera pero poderosa en el adentro y que desea más que todo ganar el juego creado por Hallyday una suerte de Steve Jobs que después de su muerte, ha logrado poner en marcha una competencia para encontrar las 3 llaves que abren la puerta para obtener el poder absoluto de este mundo virtual.

La destrucción de la realidad

Asi con esta premisa sencilla y simple el mundo de Spielberg comienza a cobrar vida, las referencias a John Hughes, a Volver al futuro, a Akira, a Kubrick a la mitad de los videojuegos de los 90´s y a las referencias musicales de aquellos días  inundan la pantalla, nos envuelven en esa idea infinita de que todo puede volver siempre y cuando se haga en el cine, Spielberg entiende perfectamente cual es su trabajo y logra comunicar esa frescura que se conecta directamente en aquellos días donde filmaba E.T el extraterrestre o Encuentros Cercanos del Tercer Tipo.

el equipo genial

Algunos críticos han dicho de Ready Player One que es demasiado insulsa, demasiado tecnológica y demasiado digital, que no hay profundidad, pero aqui es donde surge la idea de;  si el director que ha probado las mieles del éxito con cintas enteramente palomeras que hoy en dia forman parte de la cultura pop y también ha logrado brincar hacia una carrera enfocada a películas serias como La lista de Schindler o Munich o a cintas tan académicamente correctas como Lincoln que han ganado premios y distinciones por todos lados, no tiene derecho a divertirse, a volver a sus raíces y a entregarnos la que quizá se convierta en la cinta más abrumadoramente entretenida de todos los tiempos. Spielberg se merece hacer eso y lo que quiera, ya que demostrar algo en especifico lo hizo y con creces hace años.

El avatar

Aquí tenemos una prueba de que el cine no solo sirve para proponer miradas sino para plantear situaciones fantásticas que solo aquí se pueden ver. El cine sirve también para definir a varias generaciones y que puede tocar tanto a los más jóvenes que nunca vieron o se enteraron de la existencia de alguna de las miles de referencias que hay en la película, como aquellos que las vivieron y que al verlas nuevamente en la pantalla gritan de emoción.
Homenajes, auto referencias, menciones de creadores importantes, cine, música, televisión, videojuegos, ahí donde el ser humano ha decidido vivir y desear es donde esta cinta tendrá su lugar como un revoltijo de todo, extremadamente bien contado. Una suerte de licuadora donde todo se mezcla y curiosamente el sabor del resultado final es extremadamente exótico pero muy rico.

Como dice la canción con la que abre la película JUMP de Van Halen para creer hay que saltar sin mirar el fondo.

Una grata sorpresa, una de las cintas visualmente más atractivas de la temporada y porqué no, un deleite para ver en pantalla grande.

Spielberg aun con su Oscar esperando veredicto

EL VEREDICTO: Entretenida, emocionante, divertida, palomera, ruidosa, atemporal y muy actual. Así es la nueva cinta o mejor dicho el nuevo clásico de Steven Spielberg

CALIFICACIÓN: 8.5 DE 10
DIRECTOR: STEVEN SPIELBERG
ACTORES: TYE SHERIDAN, OLIVIA COOKE
Género: aventuras /ciencia ficción