LA HERENCIA DEL DIABLO

Cuando se habla de una opera prima o primer película de un director, hay casos en los cuales al ser un  recién iniciado en el arte cinematográfico y enfrentarse al reto de filmar su primer proyecto en solitario se tiene un poco más de consideración e incluso se llegan a perdonar varios errores o problemas que la película pudiese tener. Pero sin duda alguna a veces, solo a veces, un joven director puede llegar a brindar toda una experiencia cinematográfica con un extraordinario uso de las herramientas visuales y los momentos que pueden generar, que sea recordado por siempre.

Las miniaturas de un mundo grande

Y este es el caso de Ari Aster un graduado del American film Institute y que su trayectoria se compone de 5 cortometrajes que han tenido un eco mediano pero que lo han llevado a tener el suficiente acercamiento con la dirección hasta la llegada de su primer película llamada Hereditary o como le pusieron en Latinoamérica para ser un poco más sensacionalistas La Herencia del Diablo, un filme de terror puro, que estrenó en la pasada entrega del festival de Sundance con resultados extremadamente positivos, tan así que fue una de la cintas sensación del festival y de la cual todo mundo hablo.

Las drogas no siempre destruyen

Ahora y de la mano de A24 la distribuidora independiente de cintas como La Bruja(the Witch, 2015) y Viene de Noche (it comes at  night, 2017) llega a todos los cines en un inesperado estreno mundial con todo el peso del verano y tratando de encumbrar al género del terror que por estas fechas se olvida un poco, esta cinta que recuerda en expectativa lo logrado anteriormente con El Bebé de Rosemary(1968) o guardando sus distancias El Exorcista (1973).

La familia y su enervada distancia

La historia escrita también por Aster nos lleva a conocer a la familia Graham que acaba de sufrir la pérdida de la madre de Annie(Toni Collete), la matriarca de la familia y que debido al ambiente extraño del mismo núcleo familiar, nadie salvo Charlie (Milly Shapiro) la hija menor se siente aludido o con el dolor de la perdida.

Los hermanos en búsqueda

La cinta comienza mostrándonos la dinámica después de la muerte de la abuela, algunos secretos que al parecer nadie sabe y a nadie le importa, la aparición de un fantasma de la abuela o una proyección de lo que pareciese un fantasma que tampoco nadie de la da importancia y la relación de Steve (Gabriel Byrne) el padre de esta familia que se ve pasivo y comprensivo con todos y que sirve también como un intermediario entre Peter(Alex Wolff) el hijo mayor y Annie.

Charlie y su mundo aparte

Hasta aquí no hay terror, hay un drama de una perdida, de una familia extraña y distanciada entre si, de una mujer que prefiere dedicarle más tiempo a sus miniaturas y creaciones antes que a su propia familia. El hijo mayor es drogadicto, vive una vida desigual pero enajenado del mundo, la hija menor al parecer tiene una deformidad en el cuerpo y eso la hace diferente a todos, además de una obsesión por fabricar figuras con desperdicios y dibujos extraños en sus cuarto. Ari Aster se toma el tiempo de construir este universo, de entablar una relación lenta pero segura con el espectador y de mostrarnos que  si tenemos un poco de paciencia todo llegara a su sitio poco a poco.

Los terrores nocturnos

El ambiente enrarecido de los espacios donde se construye esta idea, la perfecta alusión al trabajo enunciativo de la cámara que sigue y nos muestra lo que ven los personajes y lo que no ven alrededor de ellos, comienza a generar un sentimiento de cercanía y a la vez de extrañeza en quien vemos el desarrollo de la historia. Hacia el segundo acto de la cinta, el público que es paciente empieza a tener sus dudas si lo que entro a ver se encastra en un filme de terror clásico o quizá se equivoco de sala y entro a ver un drama muy bien actuado y con situaciones muy poderosas, pero el momento llega, la trama da un giro inesperado, todo se complica y de pronto entramos en una atmósfera de horror y miedo que surca el lugar, aquí el pasado comienza a surgir, el plan maléfico esta predestinado a circunscribir a nuestros personajes, la tragedia se vuelve una experiencia verdaderamente alucinante y todo prepara al espectador para un tercer acto lleno de miedo, de agarrarse del asiento, de voltear a ver la sala y su oscuridad y que los pelos se pongan de punta.

El bosque y sus verdades

La herencia del diablo lo consigue, sin jumpscares falsos, sin maniqueísmos baratos, sin artificios y jugando extraordinariamente bien al momento de asustar genuinamente al espectador. Si, la cinta da miedo y sobre todo se queda metida en la cabeza durante largo rato. El sonido, la música, la extraordinaria fotografía de Pawel Pogorzelski que logra momentos de planos en plena oscuridad impactantes y que hacen que el espectador guarde su respiración y sienta escalofrío.

El miedo no anda en burro

El reparto digno de nominación a premios, en especial Toni Collete que se le da muy bien gritar, llorar, enojarse y a la vez ser una mujer con un enorme conflicto interior. Ari Aster no solo nos deja un sabor de boca totalmente distinto, sino que ha creado una película de terror extraordinaria, que seguramente si no es valorada por una audiencia joven que gusta de cintas mas rápidas o bien con muchos jumpscares o sustos baratos, lo será por aquellos que buscamos algo distinto, algo que esta perfectamente bien construido y que sin duda nos dejará pensando macabramente en lo que acabamos de ver.  Aster sin homenajear a nadie, sin valerse de tantos efectismos, de sonidos estridentes, sino todo lo contrario de atmósferas, silencios incomodos y mucho oficio narrativo, hace que valga la pena el precio del boleto y que de verdad si se desea entrar a vivir una experiencia de miedo verdadero, que pocas veces ofrece el verano lleno de efectos especiales y cintas que solo buscan hacer más ruido en el interior de una sala de cine, esta es la película que estábamos esperando.

Ari Aster y Toni Collete a pesar de la estatura dos gigantes

EL VEREDICTO: una de las mejores cintas de la temporada, el cine de terror está de manteles largos con este exquisito y diabólico platillo para los gustos más exigentes.

CALIFICACIÓN: 9 DE 10
DIRECTOR:ARI ASTER
ACTORES: TONI COLLETE, GABRIEL BYRNE
GÉNERO: TERROR